viernes, 30 de noviembre de 2012

Tan imperfecta como Isabel Marant

Vivimos los primeros días de una nueva era.

Se palpaba en el ambiente, la cosa se veía venir. Ya habíamos comentado aquí nuestra inquietud al respecto... pero lo de ahora es demasiado fuerte.

El Big Bang Marant.

Queremos sus chaquetas, sus putos botines, sus jerseis navajo y sus beisboleras... y ahora hasta sus canas!!!

No sé si soy yo, que estaba ciega y no se las veía o qué... yo qué sé, pero algo me dice que esta foto no puede ser casual:



Esas canas de vieja zarrapastrosa, esos pelillos acaracolados en las sienes, síntoma de que a la Marant se le cae el pelo igual que a ti y a mí y que luego le crece así de chungo... esa cara de agotamiento profundo.

Esa foto es una oda a la mujer harta de los anuncios de compresas y hasta el moño de las revistas femeninas que llevan medio siglo buscando orgasmos como si fueran gamusinos.

Esa foto, queridas, es una oda a las Antonias!!!!

En serio, debemos tanto a esa foto. Aún no nos hemos dado cuenta, pero eso es así.

Una amiga que sabe mucho ya me comentó hace un tiempo que en Londres había cada vez más voguettes que se teñían a medias o solo un poco. Ese teñirse "sí pero no" es lo que hace Isabel Marant. Baños de color una vez al año para que no haya raíces y no se tapen todas las canas. Supongo que es el truco del almendruco (perdonadme que utilice esta expresión, pero es que me parece el buenrollismo hecho dos palabras. Probadlo, decid "truco del almendruco". Lo veis, es imposible no sonreír al decirlo. Es guay. Muy guay).   

Para ser cool ahora hay que tener canas y pasar del botox y esas mierdas. Nos tienen que encantar nuestras arrugas, las imperfecciones de nuestro cuerpo, signos de vida, del paso del tiempo.  "Think one of the worst things in our world is this entire trend about surgery".

Tenemos que estar encantadas con nuestros cuerpos imperfectos, aunque no sirvan para llevar esas minifaldas tan cortas que hace ella poruqe nuestras rodillas gallináceas empiezan a arrugarse demasiado y la piel traiciona y a la que te sientas te revienta la inminente celulitis.

Ser imperfecta cuando se tiene el armario de Isabel tiene que ser muy guay. Más aún cuando se está tan delgada como ella.

En cualquier caso, yo soy pobre pero como #mecreorica pues me sumo a esa apología de la imperfección!!!! La imperfección como moda me parece muy lo más. Tan cómodo, aunque tan caro de conseguir.

Me apunto lo del zumo de zanahoria y que usa cremas de Kanebo. También tomo nota de que fuma como un carretero y me río yo de eso de que pasa siete pueblos de la ropa que lleva, que se pone lo primero que encuentra encima del montón.

Y-una-mier-da.

Vale que seas tan guay, tan natural y tan relajada y tan todo, pero no cuela.

Aunque sí, esa es la actitud.

Y yo estoy encantada con mis canas. Son gratis, coño!!!!!

Un beso a todas

Lula P.

lunes, 19 de noviembre de 2012

Cuatro meses pasado de moda


Soy muy fan del concepto 'pasado de moda'. Decirlo en 2012 es tan esnob como llevar un Trolex y tan pueril como decir "fui a Zara y ME HICE con cuatro vestidos" en lugar de utilizar el bonito, sencillo, directo y práctico verbo COMPRAR.



Hoy una chaqueta es capaz de pasarse de moda en una semana y algunos zapatos apenas lo están un cuarto hora. Ahora lo que queremos es llevar lo que dentro de un año estará de moda para poder decir entonces que para ti ya está demodé (soy fan del concepto demodé, tan pasado de moda, tan ochentero, tan de pelo frito).

Yo acabo de decidir que me gusta lo pasado de moda, que mola picomil llevar los botines que compraste hace tres años, que las blusas de seda de 2005 te siguen pareciendo de puta madre y que no cambiarías tu chupa de cuero 2006 por ninguna de las de ahora, ninque las lleve Kate Moss ninque te quieran hacer creer que las ha pensado Margiela. Puaj.

Me mola mi armario pasado de moda.



Qué coño, ahora lo chic es estar pasada de moda. Y punto. Estar al día y llevar "lo que se lleva" es una ordinariez.

Sin embargo, hubo un tiempo en que ese concepto de 'pasado de moda' fue maravilloso, un tiempo en que sí quería decir algo. Marcaba una categoría de persona, un tipo de hombre o de mujer, definía a la sociedad. En los años 20 y 30 y hasta 40, podías hablar de un vestido dos meses pasado de moda, de un tocado medio año pasado de moda... Eran rasgos definitorios de las personas. Un hombre que llevaba un abrigo de cashmere hecho a medida, una mujer con dos piezas de seda que se sentía terriblemente incómoda dentro de ese vestido cuatro meses pasado de moda... una joven con un sombrerito a la última traído de París.



Durante esos años, la ropa significaba algo. La moda ordenaba el caos.

Hace unas semanas leí un libro que no recomiendo pero que me entretuvo bastante, la primera novela de Amor Towles, 'Normas de cortesía', que compré en un aeropuerto sólo porque me gustó que un hombre se llamara Amor.

'Normas de cortesía' es un libro que está lleno de carencias, que sólo a ratos es auténtica literatura y que se pierde en la descripción. Sin embargo, entretiene de verdad y tiene conatos interesantes como la libertad que regala la música jazz y este que os digo de perfilar personajes por su ropa y por sus maneras.

Habla de la vacuidad del aspecto, que aunque no quiere decir nada sí se puede utilizar como arma embaucadora.



Ahora tener un Rolex no te abre las puertas a un club privado y llevar un MMM de HM solo te convierte en alguien capaz de pagar 300 euros por algo de HM.



Así que rediós, viva lo pasado de moda!!!!!!

Esa es mi nueva religión y pienso ser tan adepta, tan adepta, tan adepta que hasta me la podréis oler.

Cuatro años después de verlo aquí y luego aquí y luego aquí y luego por todo en plan, Lula por dios, tienes que probarlo, tú que no soportas el perfume, que no has usado jamás porque los olores te provocan jaquecas (jaqueca... qué palabra maravillosamente femenina).

... pruébalo, pruébalo...

Y por fin lo probé y estoy obsesionada y he decidido que ese es el olor de mi vida.

Porque misteriosamente no me duele la cabeza, a pesar de estar taaaaaaaaan irremediablemente pasado de moda.

Será porque es un olor que recuerda a esa época en la que llevar ropa pasada de moda o ir a la última podía cambiar tu vida.

Un beso a todas


Lula P.

(Fotografías de Walker Evans, 'Subway Portraits')

viernes, 9 de noviembre de 2012

Raíces: Cerámica de Sargadelos


Ya sé que os encanta hablar de jerseis y cremas, pero hoy toca momento casa. Retomo la serie Raíces para hablar de esa maravilla de la humanidad que es la cerámica de Sargadelos.



Gracias a los gallegos por hacer cosas tan bonitas, tan de adelantados a su tiempo, tan cool y tan todo. La cerámica de Sargadelos es inteligente, pragmática, directa y luminosa en su concepto. Acabo de leer por google que pertece a un conato de Bauhaus gallega y esa reflexión me parece lo más.

Tomarse un café o un té en una de estas tazas blancas y azules es una experiencia extracorpórea. Vuelas directamente. Es un desafío a Newton y a la biomasa. Esas tazas son tan livianas que podrías echarles un millón de litros de leche y seguirían sin pesar. Son tazas-pluma con millares de células grises.




Son las tazas y las jarras que utiliza Almodóvar en sus películas, tienen ese aire retro que podría ser moderno y gafapastero, pero no. La cerámica de Sargadelos no entiende de gilipolleces. Si tienes un juego de Sargadelos eres guay aunque te dé alergia la cámara Diana y te niegues a empapelar tu casa como si estuvieras en 1975.




La cerámica de Sargadelos es ese juego de café que viste toda tu vida en la vitrina de tu abuela y tantas veces ignoraste o despreciaste. Ahora MATARÍAS por tenerlo, pero te jodes y te aguantas por tonta, por paleta.

La historia de esta cerámica la podéis googlear igual que yo. Todo empezó con un asturiano muy listo a finales de 1700.

Además de las tazas y los platos, en Sargadelos hacen figuras y esas cosas decorativas y hasta joyas y lo venden por todo el mundo.



Y ya está.

Este post se lo dedico a MissB, a María y a todas las gallegas guays.

Un beso

Lula P.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Especie a evitar: las intensas


No puedo con las intensas. Me irritan las mujeres y mujeros que se toman todo como una gran epifanía. Tengo alergia a su ombliguismo y a su narcismo, pero sobre todo me supera que son personas con cero capacidad para reírse de sí mismas.

Creo que tendríamos que asesinarlas a todas. Con mucha sangre volando, a lo American Horror.

En el mundillo de la moda o la pseudomoda o como cojones queráis llamarlo, hay intesas a porrones (qué gran palabra, tan infantil, tan plástica, tan divertida... a porrones o a porrillos. Mola)...

...eteee... iba diciendo que en el mundo de la moda las intensas son plaga. La peña se toma todo tan en serio que dan ganas de echarse a dormir durante las 24 horas o ir por la vida con tapones para los oídos y nunca leer nada de moda.  Muchísimo menos blogs de moda. Esos son los peores. Este incluído.

No hay nada peor que un texto sobre moda escrito con solemnidad y plagado de perífrasis verbales y circunloquios. Puaj, poto.

Pero las peores son las intensas que se creen de una especie superior. Querida, siempre habrá alguien más listo que tú. Get over it!!!

Podría poneros ejemplos de intensas insorportables, pero no me da la vida.Yo qué sé.. para mí que Jessica Alba y Siena Miller están dentro de esta irritante especie a evitar.

Y para terminar necesito ampliar la lista de quieronecesidades para este invierno:

-Llevo un año o dos buscando un puto jersei azul marino de cuello redondo cerrado de cashmere. No lo encuentro. Lo único aproximado es el de lana merino de Cos de esta temporada, pero no queda exactamente como yo quiero. Necesito que sea un azul marino bonito de verdad, que no sea un azul marino de monja novicia ni de colegio privado.

El azul marino bonito es mucho más difícil de encontrar de lo que parece!!!!




-Otra cosa que es muy difícil de encontrar son unos vaqueros color vaquero que sean bonitos y que sean pitillo pero no petados. Un tinte azul un tanto intenso y muy americano. Eso quiero yo (quizir, los que lleva Sarah Harris ahí arriba. Y el jersei también... y el pelo y los zapatos. Queridos Reyes Magos, que he sido muy buena este año).

Si lo encontráis todo, avisadme.

Mientras tanto, voy a cortarme las venas un rato de tanta intensidad.

Un beso a todas

Lula P.

Pd: Confirmado, Paula Choice es lo puto más.